De sueños, deseos y otros cuentos...

Pues bien… el dia de ayer (21 de marzo) fui a un concierto masivo de rock. Cosa curiosa fue organizado por una estación de radio de pop (si de pop). Y digo cosa curiosa porque se supone que el mercado al que va dirigido son adolescentes que gustan de este género musical y resulta que organizan toquines de rock.   Bueno pero ese no es el punto… La cita era a las 5pm y yo con mi exactitud de reloj suizo llegué a la 5 en punto. Quedé de verme con una amiga y la encontré justo cuando hacia fila para entrar al estacionamiento (muy conveniente por cierto).   No tardamos nada en entrar, tengo que reconocer la buena organización. Una vez dentro no había tanta gente tal vez porque era temprano pero era justo la hora en que los rayos del sol caen directo en los ojos, de esas veces que te sientes vampiro y buscas como desesperado una sombra. Buscamos algo de beber, cerveza para mi amiga y agua para mi. No crean que porque tenia que manejar de regreso a mi casa, solo que no tomo alcoh

Si no están muy familiarizados con esta frase o no saben inglés, significa la mitad de marzo. El 15 de marzo día feriado en el antiguo calendario romano dedicado al dios Marte. O el día en el que Julio Cesar fue asesinado (dato cultural). Pero como siempre no hablaré de eso. El escrito de hoy se lo dedico al mes de marzo. Sí, leyeron bien, al mes de marzo.  Si son seguidores de mi blog habrán notado que desde hace varios meses me invadía  un estado de depresión el cual no podía superar. Ese estado culminó con el cierre de mi cuenta de Facebook.  Y en efecto. Ahora soy feliz, muy feliz. Curiosamente me he sentido así desde que empezó marzo. No se si tenga que ver con el tiempo per se (el tiempo lo cura todo) o porque ahora que está a punto de entrar la primavera los días son mas soleados y mas largos. El punto es que me gusta marzo. El frio se va pero no hace tanto calor como en mayo por ejemplo. El ocaso se empieza a retrasar.  Y todo parece mas lindo bajo los rayos

Pues bien, cerré mi cuenta de Facebook. Fue hace exactamente 11 días. No les miento, los primeros días fueron como una tortura. Ahora ya no lo es tanto e incluso soy más feliz. Decidí cerrarla por cuestiones personales (si, acertaron, involucran chicos y mi corazón). Vivía en una especie de vida paralela virtual que lo único que me causaba era una ansiedad constante. No soportaba estar 2 o 3 horas sin saber que era lo que ocurría con mis “amigos”. En un momento de ira decidí cerrar la cuenta. Y todavía tienen el cinismo de poner: “Estas seguro que quieres desactivar tu cuenta? Fulanito y zutanito te extrañarán” WTF? Yo solo pensaba: noooo poooooor favoooooor!   Pues lo logré. La cerré. Tengo que admitir que esto de las redes sociales es una adicción. Ya tenia una cuenta de Twitter que no utilizaba mucho pero desde que ya no soy parte de la comunidad facebookera decidi migrar hacia la comunidad de twitteros. Y para mi gran sorpresa es mucho mejor que el Facebook (obviame