Parando tráfico
El sábado pasado fui a una presentación de la escuela de baile de una amiga. Fue en un teatro que está sobre una avenida bastante grande, seguro se preguntarán que tiene que ver eso, pero es justamente la historia que nos lleva al título de esta entrada. En fin, la presentación estuvo muy bien, pero de eso hablaré en otra ocasión. El punto es que al salir del teatro había que cruzar la gran avenida hasta el otro lado y lo peor del caso es que había caído una tormenta colosal y había charcos chocolatosos por todos lados, sin mencionar el camellón que en vez de pasto más bien parecían arenas movedizas con tanto lodo. Mi amiga y yo caminábamos a toda prisa saltando charcos, aunque más bien parecía que jugábamos bebeleche (típico juego de saltar en cuadritos numerados, también conocido como avión) cuando unos trabajadores de la construcción voltean y nos dicen: “¿van a cruzar?”. Por un segundo pasó por mi mente un pensamiento de salir corriendo ya que la reputación que tienen esta...